La quiero
La quiero.. es la única persona capaz de hacerme a la vez la mujer más feliz del mundo y la más desgraciada. Ahora soy la más desgraciada, pero no puedo odiarla, porque la quiero. La amo. La amo con todo mi corazón y en este instante sólo correría hacia ella para tirarme a sus brazos, para decirla que la extraño…que ella es toda mi vida. Que por mucho que intente engañarme no consigo olvidarla, ni quiero a otro…la quiero a ella, porque es ella, es ella mi vida, mi niña, la que me hace sentir que aún sigo viva, la que me hace daño a cada palabra que escribe, la que me quita el alma con sus desprecios; pero la dueña de mis sueños, la dueña de este corazón muerto, ella es mi aliento.
Quiero odiarla y no puedo por más que lo intento. Quiero no ponerme nerviosa cuando me habla. Quiero tener valor para no contestar, para decirla que no permitire que continue jugando conmigo. Pero la quiero tanto, que si jugando conmigo, haciéndome lo que hace es el único modo de tenerla cerca; lo acepto. Acepto sus desprecios, sus miedos y sus mentiras, acepto sus despedidas sin adios, sin precedente, acepto pasar así el resto de mi vida; a cambio de ver al menos una pequeña de sus sonrisas.
Sólo pido una tarde,, una tarde junto a ella. Sólo quiero saber lo que se siente teniendo la felicidad entre tus manos, incluso rozar sus labios. Sólo quiero sentirla, aunque sea para despedirla. Aunque todo sea una mentira, aunque al rato me despierte admitiendo la derrota.
0 comentarios